
Qué ver en Sevilla en 3 días.
Día 1. Alicante-Sevilla.
Sevilla es una de esas ciudades españolas que hay que visitar por lo menos una vez en la vida. Sevilla es la ciudad más poblada de Andalucía y la cuarta de España. Y la única ciudad con un puerto marítimo de interior. El rió Guadalquivir, que parte a la ciudad en dos, se puede navegar desde la ciudad hasta su desembocadura.
Nosotros esta vez decidimos ir en coche desde Alicante aprovechando el puente de octubre, son 493km, unas cinco horas y media en coche. Como tenemos costumbre hicimos parada obligatoria en el Restaurante Venta Quemada, cerca de Granada. Donde se puede comer desde un bocadillo, menú del día o a la carta a muy buen precio.
Llegamos al Hotel Derby Sevilla sobre las 19:00h. Así que como ya era tarde hicimos el check in y sin perder tiempo, salimos a recorrer las calles cercanas y buscar algo dónde cenar.

Sevilla es un lugar, como ya sabréis, perfecto para tapear, por lo que decicimos parar en varias tabernas para ir picando algo, y al mismo tiempo, hacer turismo gastronomico, que es muy nuestro. Siempre comentamos que tenemos buen ojo, o una especie de sexto sentido para elegir lugares donde tapear y donde comer o cenar, y en Sevilla no iba a ser menos.
La primera parada que hicimos fue La Bodega de la Alfalfa, encantador desde el primer momento, y aunque hicimos una pequeña cola ( seguramente debido a la fecha que era ) , nos sentamos y probamos la ensaladilla de pulpo, solomillo al whisky , muy típico en Sevilla y unos huevos revueltos, acompañado de sus correspondientes cañas de cerveza.
Seguimos recorriendo el centro de Sevilla, ahora ya con algo en el estómago. La siguiente parada fue La Flor de Toranzo, famoso por sus montaditos y por el Jamón. Nos pedimos unos de lomo con manzana y un platito de jamón. Estaba todo riquísimo.
Después de cenar y pasear por el centro, con todas las terrazas abarrotadas de gente, nos apetecía relajarnos y tomar una copa en un sitio muy especial. Tuvimos la suerte de ir a la terraza del Hotel Doña María, donde, ademas de disponer de una amplia carta de bebidas, tiene el encanto de tener unas vistas increíbles a la Giralda.
Ahora si, podíamos ir a descansar para el día siguiente.
Dia 2. Reales Alcázares de Sevilla, Torre del Oro , Jardines de María Luisa y Plaza de España.
Jardines de Maria Luisa y Plaza de España
Nos despertamos sabiendo que hoy iba a ser un día de mucho andar, pero también de disfrutar.

La primera parada importante en nuestro itinerario son los Reales Alcázares de Sevilla. Es el nombre que tiene el palacio de la ciudad. Situado en un asentamiento romano y posteriormente Visigodo, el Califa de Córdoba Abderrahmán III an-Násir ordenó, en el año 913, el levantamiento del nuevo recinto del gobierno. Posteriormente, en el 1248, tras la reconquista castellana se dotó al Real Alcázar de la condición que perdura hasta hoy, sede de la Corona y ámbito del poder municipal de la ciudad. Hay por tanto una mezcla de culturas impregnadas en cada rincón que hacen que sea tan especial. Como curiosidad, ha sido escenario de la famosa serie de HBO Juego de Tronos, concretamente en la temporada 5, recreando El Reino de Dorne.

El Reino de Dorne en Juego de Tronos de HBO, los Reales Alcázares de Sevilla.
El horario los Reales Alcázares de Sevilla es de 9:30 a 17:00 de octubre a marzo y hasta las 19:00 el resto de año. El precio de la entrada general es de 11.50€. Os recomendamos comprarla con antelación para evitar las colas de entrada.
Podrías estar horas paseando por las jardines y descubriendo las diferentes estancias. Después de estar toda la mañana nos decidimos a salir y buscar algún sitio para tomarnos una cerveza. El sitio elegido fue Cafe-Tapaz Bodeguita Puerta Jerez, os lo recomendamos porque la cerveza estaba casi congelada. Cosa que se agradecía, debido al calor que hizo ese día.

La siguiente para fue la Torre del Horo, levantada a principios del sigo XIII.
Su nombre en árabe era Borg-al-Azajal, que venía a expresar, que el revestimiento de azulejería dorada que destellaba con el sol era como el oro y se reflejaba en el río dañando la vista. La leyenda cuenta que la Torre del Oro servía como refugio a las damas que cortejaba el Rey Pedro I el Cruel,
mientras que su esposa, María de Padilla, habitaba en el Alcázar.
Aquí dimos un paseo por toda la zona y volvimos hacia el centro para comer en el restaurante Donaire Azabache. Disfrutamos de unas tapas de berenjenas crujientes con miel de Azahar, buñuelos de bacalao, pulpo sobre crema de manteca colora y un timbal de cola de toro sobre puré de batata. Todo riquísimo.
Después de comer, nos dirigimos dando un pequeño paseo hacia el fantástico Parque de María Luisa. Conocido como el pulmón de Sevilla, se trata de una extensión de 34 hectárias, inaugurado hace mas de un siglo, con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929.
Es tan extenso que se tardaría un día entero en ver todas las maravillas que hay en su interior, ya no solo por la variedad vegetal que posee, si no por los edificios y rincones que hay por todo el parque. Cabe destacar el Monte Gurugú, un macizo en medio del parque donde están las mejores vistas. Otra parada obligatoria es la Glorieta de Becker. Para nosotros el lugar mas romántico del parque. Este monumento dedicado al poeta representa a través de tres mujeres, el amor que pasa, el amor poseído y el amor perdido. Detrás podemos ver a un hombre retorciéndose de dolor y un Cupido que simbolizan el amor herido y el amor que hiere.

Dentro del parque, se encuentra la impresionante Plaza de España, de forma semi-elíptica que simboliza el abrazo de España a sus antiguos territorios americanos. Es una edificio especialmente bonito, por lo grande que es y por lo que simboliza. Ademas es uno de los edificios mas visitados de Sevilla. Como curiosidad, ha aparecido en multitud de películas y series muy famosas, como por ejemplo Star Wars, el ataque de los clones o Lawrence de Arabia.
Como ya se hizo algo tarde, tras pasear por los jardines y la Plaza de España durante toda la tarde, decidimos que era hora de volver al centro para disfrutar de la gastronomía sevillana.
Paramos en varias tabernas del centro, para hacernos unas cañas y alguna tapa. Cualquier sitio del centro de Sevilla os van a tratar genial y esta todo buenísimo. Después, fuimos a la Bodeguita de Antonio Romero Reyes, donde disfrutamos de una ración de pescaito frito, y unos montaditos de “pringa” y jamón serrano. Agotados, volvimos al hotel a descansar.
- Os dejamos la segunda parte de este viaje: